Durante su estad en Río Jerez en el municipio de Dibulla, desde el 19 de octubre del presente año, la Corporación Autónoma Regional de La Guajira, realizó todo un proceso de readaptación a un ambiente natural, así como un exhaustivo trabajo médico para garantizar la salud de estos ejemplares.
Los Flamencos fueron liberados en el sector de Musichi, municipio de Manaure, hogar del Santuario de Flora y Fauna del Flamenco Rosado, un corregimiento netamente wayuu, dedicado al pastoreo y la pesca.
“Para la CAM es motivo de alegría saber que estos animales hoy están disfrutando de su libertad en medio de su entorno natural, del cual jamás debieron haber sido sacados”, indicó Rey Ariel Borbón Ardila, director general de la CAM.
Antecedentes
Las aves que habían sido recuperadas en distintos operativos realizados por la Policía Ambiental y Ecológica y la CAM, hechos que dejaron a dos personas sancionadas por parte de la CAM, llegaron al Huila a través del mercado ilegal de fauna.
El flamenco rosado (Phoenicopterus ruber) está catalogado como una especie altamente vulnerable y en vía de extinción, según el Libro Rojo de Aves de Colombia, categoría que fue ratificada mediante resolución 383 de 2010 del Ministerio de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial. De acuerdo con esa publicación, en 1998 tan solo existían 5.818 individuos, dato que contrasta con otras versiones no oficiales, que establecen que tan solo un reducido número de mil aves habitarían el planeta.
Es una especie migratoria, que en Colombia solo se localiza en las costas de La Guajira. Se alimentan de algas, moluscos y crustáceos marinos, lo que les da el color rosado que los caracteriza.