Nuestro estilo de vida tiene un impacto directo en la sostenibilidad de los recursos naturales que posee el planeta. La emisi elevada de los Gases de Efecto Invernadero, el calentamiento global y el cambio climático que éste desencadena producen gran preocupación alrededor del mundo generando una conciencia colectiva sobre qué decisión tomar antes de destruir el planeta.
Con el propósito de disminuir los efectos del cambio climático, se han creado mecanismos y aplicaciones capaces de calcular el impacto que generamos en el planeta al realizar cualquier clase de actividad. Uno de los procedimientos que últimamente nos permite tomar decisiones responsables a la hora de consumir y actuar de manera amigable con el medio ambiente se le ha denominando “Huella Ecológica”.
Todos los seres humanos necesitamos de recursos básicos como alimentación, energía, agua y oxigeno para crecer, vivir y realizar toda clase de acciones. En nuestro caso, el estilo de vida al que estamos habituado, condiciona la cantidad de recursos que debemos utilizar. El consumo desmedido de dichos recursos reduce la superficie de bosques, ríos, manglares, selvas y otras fuentes naturales en el mundo.
Se ha denominado Huella Ecológica a ese impacto que puede producir una ciudad u organización sobre el planeta para satisfacer sus gustos y consumos. Esta medición que aparece a principios de los años 90, es un análisis que se hace mediante la evaluación de la tierra productiva y el área marina requerida para producir los recursos que consume una población, absorbiendo sus residuos y utilizando la tecnología del momento. Los valores para obtenerla se clasifican en carbono, alimentación, servicios, vivienda y bienes, así como el número total de planetas necesarios para sostener a la población mundial dado el nivel de consumo.
Por medio de un test sencillo que va desde ¿cuántas veces al día lavamos los platos? o ¿de qué material está construida nuestra vivienda? Podemos evaluar nuestra huella ecológica.
La Huella Ecológica estuvo presente en Bioexpo Colombia 2010, la feria de productos y servicios de la Biodiversidad, amigables con el medio ambiente, que organizó la CAM y Corpoamazonía en Neiva del 18 al 21 de noviembre.