En lo corrido de este año han sido trasladados 17 búhos hasta el Centro de Atención y Valoración de la CAM por ser víctimas de ataques, particularmente apedreados y provenientes de áreas urbanas.
Con un llamado a los huilenses para que cuiden y respeten las aves nocturnas, especialmente los búhos, la Corporación Autónoma Regional del Alto Magdalena CAM lanzó la campaña ‘Abre los Ojos por los Búhos’.
Los búhos, que son aves nocturnas con una amplia distribución en el departamento del Huila debido a la presión que reciben sus hábitat naturales por causas humanas, se han convertido en aves urbanas, situación que representa un alto grado de amenaza para su supervivencia.
En los últimos días en las Direcciones Territoriales Sur y Centro de la CAM ingresaron dos búhos orejudos (Asio stygius) gravemente heridos, lo que conllevó a sus muertes, pese a los esfuerzos realizados por los médicos veterinarios del Centro de Atención y Valoración CAV de la autoridad ambiental.
El búho que ingresó a la Territorial Sur presentó una herida de bala, ocasionándole la pérdida total de una de sus alas; mientras que el búho rescatado por personal de la Dirección Territorial Centro llegó altamente golpeado, al parecer apedreado.
“En lo que va corrido del año han llegado 17 búhos hasta el CAV, todos han presentado serios ataques, particularmente apedreados y provenientes de áreas urbanas, de allí nuestro llamado urgente para que los cuidemos y valoremos, ya que ellos representan un importante papel en el ciclo natural del medio ambiente”, aseguró Carlos Andrés González Torres, subdirector de Regulación y Calidad Ambiental de la CAM.
Aves nocturnas del Huila
El departamento del Huila concentra cuatro importantes especies de aves nocturnas: la lechuza (Tyto alba), el currucutú (Otus choliba), el búho rayado (Rhonptynx clamator) y el búho orejudo (Asio stygius). Aunque ninguna se encuentra reportada bajo alguna categoría de vulnerabilidad por parte de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (Uicn), sí están contemplados dentro del Apéndice II del CITES, donde se incluyen las especies que no están necesariamente amenazadas de extinción pero que podrían llegar a estarlo a menos que se controle estrictamente su comercio y su caza.
“La pérdida de áreas boscosas ha sido la principal amenaza para estas especies; sin embargo, existen otras creencias erradas como que los búhos son de mala suerte o que lOs vinculas a actividades exotéricas, situaciones que ponen en grave riesgo a estas poblaciones”, señaló Genaro Lozada Mendieta, director de la Territorial Sur de la CAM.
Búho orejudo
Es considerada una de las especies de búho más raras, irregulares y difíciles de observar. También conocido como búho negruzco es estrictamente nocturno, depredadora, con capacidad de regular poblaciones de pequeños vertebrados en comunidades ecológicas.
Currucutú
En Colombia es el búho más común y generalizado, es una de las especies más exitosas y adaptables en América del Sur, pero se sabe poco acerca de su historia natural. Esta especie se caracteriza por sus “orejas” formadas por penachos de plumas. En realidad, su función dentro de la naturaleza es muy positiva para el hombre, gracias a sus hábitos alimenticios contribuye a eliminar plagas agrícolas y vectores de enfermedades.
Lechuza
La Lechuza ha sido de gran utilidad en el control de plagas como roedores, ayuda a mantener bajas las poblaciones que afectan los cultivos y la salud pública.
Búho rayado
Esta especie se alimenta de mamíferos pequeños, insectos grandes y lagartijas. Durante el día duerme en matorrales bajos sobre el suelo; caza en vuelo o desde perchas expuestas, como cables de luz, abalanzándose sobre sus presas.